Durante los festejos del Centenario de la Revolución de Mayo, en 1910, el gobierno argentino destinó fondos para la construcción de un monumento a la bandera en Santa Fe. El mismo fue encargado a la artista Lola Mora, quien presentó un proyecto y fue aprobado. La tucumana comenzó a trabajar en el mismo en Italia, pero el contrato fue rescindido en 1928. Sin embargo, varias de sus escultura forman parte del monumento.
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Lola Mora ya era una reconocida artista cuando fue convocada para ejecutar la obra del Monumento Nacional a la Bandera de la Ciudad de Rosario, Provincia de Santa Fe.
La artista tucumana comenzó a realizar algunas esculturas del proyecto en Italia, y las iba enviando a medida que las terminaba.
Sin embargo, durante el proceso comenzaron a surgir distintos problemas. Por un lado, los fondos comenzaron a ser escasos y Lola Mora perdió prestigio por sus obras con desnudos que eran fuertemente criticadas por la sociedad de la época.
La Patria Viva, escultura de Lola Mora en el Monumento Nacional a la Bandera.
En 1928, el gobierno rescinde el contrato con Lola Mora, y las esculturas de la artista deambularon por la ciudad, hasta que en 1977, fueron reacondicionadas e instaladas en el Pasaje Juramento, en el Monumento a la Bandera Argentina actual que se comenzó a construir en 1943 e inaugurado en 1957, siendo el proyecto de los arquitectos Ángel Guido y Alejandro Bustillo, en colaboración con los escultores Alfredo Bigatti y José Fioravanti.
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