Día Mundial del Teatro – 27 de marzo

El 27 de marzo se celebra el Dia Mundial del Teatro. Brett Bailey es el encargado del mensaje del Día Mundial del Teatro promoviendo la Cultura de la Paz.

Extremista

El 27 de marzo de cada año tiene lugar el «Día Mundial del Teatro» conmemorando la fecha de apertura del «Teatro de las Naciones» en 1962, París, Francia. En cada celebración se realizan funciones y actividades relacionadas a esta disciplina y un artista de talla internacional es invitado a emitir un mensaje sobre el tema y una Cultura de Paz. En 2014 el encargado es Brett Bailey, actor y director sudafricano.

Add Normal tras corte

Brett Bailey
Brett Bailey realizó el Mensaje del Día Mundial del Teatro 2014.

En 1961 el Instituto Internacional del Teatro creaba el Día Mundial del Teatro (ITI). Esta fecha se celebra el 27 de marzo por los centros ITI y la comunidad teatral internacional en conmemoración a la apertura del Teatro de las Naciones» en París.

Cada año una figura destacada del teatro o una persona excepcional de otro campo es invitada a compartir sus reflexiones sobre el teatro. Esta reflexión se conoce como el Mensaje Internacional del Día Mundial del Teatro, el cual debe fomentar la Cultura de la Paz.

El primer Mensaje del Día Mundial del Teatro fue redactado por el francés Jean Cocteau. En 2014 el encargado es Brett Bailey, dramaturgo, director y diseñador del grupo «Third World Bun». Sus obras brillaron en Europa, Australia y África, ganando varios premios.

Mensaje de Brett Bailey para el Día Mundial del teatro 2014:

Donde quiera que haya sociedad humana, el irreprimible Espíritu de la Representación se manifiesta.

Bajo los árboles de pequeñas aldeas y sobre sofisticados escenarios en grandes metrópolis; en salones de actos de colegios y en campos y en templos; en suburbios, en plazas públicas, en centros cívicos y en los subsuelos de las ciudades, la gente se reúne en comunión en torno a los efímeros mundos teatrales que creamos para expresar nuestra complejidad humana, nuestra diversidad, nuestra vulnerabilidad, en carne y hueso, aliento y voz.

Nos reunimos para llorar y para recordar; para reír y contemplar; para aprender, afirmar e imaginar.
Para maravillarnos ante la destreza técnica, y para encarnar dioses. Para dejarnos sin respiración ante nuestra capacidad de belleza, compasión y monstruosidad. Vamos para llenarnos de energía y poder. Para celebrar la riqueza de nuestras diferentes culturas, y para hacer desaparecer las barreras que nos dividen.

Donde quiera que haya sociedad humana, el irreprimible Espíritu de la Representación se manifiesta. Nacido de la comunidad, lleva puestas las máscaras y vestimentas de nuestras distintas tradiciones. Utiliza nuestras lenguas, ritmos y gestos, y abre un espacio entre nosotros.

Y nosotros, los artistas que trabajamos con este antiguo espíritu, nos sentimos impulsados a
canalizarlo a través de nuestros corazones, nuestras ideas y nuestros cuerpos para revelar nuestras realidades en toda su cotidianeidad y su rutilante misterio.

Pero en esta época en la que tantos millones de personas luchan por sobrevivir, sufren bajo regímenes opresivos y el capitalismo depredador, huyen del conflicto y la escasez; en la que nuestra privacidad es invadida por servicios secretos y nuestras palabras censuradas por gobiernos intrusivos; en la que se aniquilan los bosques, se exterminan especies y se envenenan los océanos: ¿Qué nos sentimos impulsados a revelar?

En este mundo de poder desigual, en el que distintos órdenes hegemónicos intentan convencernos
de que una nación, una raza, un género, una preferencia sexual, una religión, una ideología, un marco cultural es superior al resto, ¿se puede realmente defender la idea de que las artes deberían apartarse de las agendas sociales?

Nosotros, los artistas de escenarios y ágoras, ¿nos conformamos con las demandas asépticas del
mercado, o utilizamos el poder que tenemos: para abrir un espacio en los corazones y las mentes de la sociedad, para reunir gente a nuestro alrededor, para inspirar, maravillar e informar, y para crear un mundo de esperanza y colaboración sincera?

Traducción: Fernando Bercebal.

El Mensaje del Día Mundial del Teatro suele ser leído antes de las presentaciones en los teatros de todo el mundo e impresos en distintos medios. Cientos de emisoras de radio y televisión se suman a este mensaje de la Cultura de la Paz en todo el mundo.