Gran Hermano 2011 tomó la decisión de sancionar a los participantes del Reality Show por haber roto las instalaciones de la casa, entre ellas cámaras, micrófonos y puertas. La misma consiste en reducir el presupuesto semanal como si hubieran perdido la prueba. Esto hizo enojar a los hermanitos, y en el vivo, Cristian Urrizaga afirmó que la producción no los está cuidando, dado que no mandan remedios ni atención médica ni psicológica cuando lo solicitan.
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Cristian U aseguró en la gala de Gran Hermano 2011 en vivo que él necesita un medicamento para las llagas y no se lo mandan. Además afirmó necesitar un psicólogo porque está súper alterado y no escuchan su pedido y que Loreley Donate tiene el pié lastimado y solo le dan ibuprofeno para calmar el dolor.
Cuando los participantes de GH 2011 escucharon que la decisión de Gran Hermano era reducir el presupuesto a la mitad, se alteraron, y consideraron que era muy injusto, dado que nunca tuvieron una advertencia.
Entre otros de los reclamos por parte de los hermanitos fue que el confesionario no está siempre abierto, recordando el «piquete» que debieron hacer en esa oportunidad frente a la puerta. Por otro lado, Luz Ríos, señaló que en la semana que hubo poco alimento, a uno de los participantes le bajó la presión.
Cristian Urrizaga aseguró que las «guerras» son la única manera de descargar todo esto, por lo que pidió que les den algún juego alternativo para despejar la cabeza, más allá de que esto sea un «juego para que nos volvamos todos un poco loquitos para ver la reacción que tenemos».
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