El avión supersónico Concorde surgió del trabajo en conjunto de los fabricantes British Aircraft Corporation británico y Aerospatiale francés. Entró en servicio en 1976 y el 25 de julio de 200, el vuelo 4590 de Air France se estrelló en Gonesse, muriendo los 100 pasajeros, 9 tripulantes y 4 personas en tierra. Por la baja de interesados en utilizar el servicio, dejó de cruzar los cielos el 26 de noviembre de 2003.
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El Concord fue el segundo avión supersónico de uso comercial en el mundo, siendo el primero el ruso Tupolev Tu-144 que lo superaba en capacidad y velocidad pero no en autonomía de vuelo.
El 25 de julio de 2000, el vuelo 4590 de Air France se estrelló en Francia, acabando con la vida de 100 pasajeros, los 9 tripulantes y 4 personas que se encontraban en tierra. El accidente habría sido causado por una franja de titanio que se desprendió de un avión Continental Airlines DC-10 que había despegado minutos antes. Este fragmento de metal perforó uno de los neumáticos que, mientras el Concord se encontraba a 300 km/h, estalló. Uno de los trozos de goma desprendidos golpeó uno de los tanques de combustible. Si bien el depósito no fue afectado, la onda de choque provocó que una de las válvulas de combustible situada en el ala izquierda reventara. Esto causó una fuga, que unido a las chispas del cableado afectado por el impacto, provocó el incendio del motor 2.
En respuesta al incidente, la tripulación bloqueó el motor afectado, pero el avión perdió fuerza en los motores 1 y 2, lo que causó una pérdida de altura y velocidad. Tras un violento descenso, el Concorde chocó contra el Hotelissimo Hotel de Gonesse.
A raíz del accidente, se aplicaron mejoras al diseño, modificando el sistema electrónico, tanques de combustible más resistentes y un revestimiento extra en los neumáticos. Sin embargo, la gente perdió interés en volar en estas aeronaves, y sumado a la crisis de los vuelos tras el atentado a las Torres Gemelas del 11 de septiembre de 2001, el 10 de abril de 2003, Air France y British Airways anunciaron la retirada del Concorde. El 26 de noviembre de ese mismo año, el avión supersónico realizó su último vuelo.
Cabe señalar que a pesar de que el Concorde fue una revolución tecnológica, al momento de su retirada, por la falta de competencia de la que había gozado, no se produjeron mejoras significativas en las naves supersónicas, por lo que no se hicieron variantes como otros aviones de la misma época.
Video en YouTube de reconstrucción del accidente del Concorde:
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